Salud Humana
Se ha evaluado que aplicando los conocimientos y la tecnología disponibles, pueden prevenirse entre 50% y 60% de las muertes por cáncer. Tal logro requiere que se encaren acciones múltiples y complejas, además de la detección oportuna y el tratamiento efectivo. La tecnología nuclear ha demostrado ser un poderoso instrumento en el diagnóstico y tratamiento de estas enfermedades.
La medicina nuclear y la radioterapia se han desarrollado de forma importante en las últimas décadas en la mayoría de los países de América Latina, incrementándose su base tecnológica, la disponibilidad de los diversos radiofármacos que se requieren para el diagnóstico y la terapia, y la preparación de los recursos humanos. El programa de cooperación técnica, a través de los proyectos ARCAL y del OIEA, ha contribuido a estos objetivos. Sin embargo, son aún muchos los retos a encarar y, en este sentido, el PER constituye un instrumento eficaz de guía de los recursos de cooperación técnica hacia las principales prioridades identificadas, ya que el análisis estratégico ha concluido que los esfuerzos en el periodo 2016-2021 se deben orientar al fortalecimiento de los Programas Nacionales para el Control del Cáncer como estrategia para la solución de las demás necesidades/problemas identificados y priorizados en el sector de la salud humana, que son:
- Mejorar la eficacia y calidad en el uso de las nuevas tecnologías para el diagnóstico y tratamiento de enfermedades.
- Carencia de sistemas de gestión tecnológica apropiados para la planificación, ncorporación y mantenimiento de equipos biomédicos.
- Insuficiencia de tecnólogos en radioterapia y medicina nuclear para cubrir la creciente necesidad ligada a la aparición de nuevos centros en la región.
- Insuficiencia de recursos humanos en física médica, en los servicios de imagenología (medicina nuclear y radiología).
- Insuficiencia de Planes Nacionales de Control de Cáncer (PNCC) integrales, funcionales y operativos.
- Obesidad infantil creciente en la región, y su relación con la incidencia de enfermedades no transmisibles, causada en parte por los problemas de malnutrición en la primera infancia.